Blockchain: El Humo Tecnológico que Nos Venden

Desenmascarando la realidad tras el brillo digital

ZubIronico
julio 30, 2025

Ah, el blockchain, esa palabra mágica que promete solucionar todos los problemas del mundo, desde la pobreza hasta el mal aliento. Porque, claro, nada dice "futuro brillante" como una cadena de bloques que nadie entiende del todo, pero que todos adoran como si fuera la segunda venida de la rueda.

Empecemos por la joya de la corona: Bitcoin. El oro digital que prometía liberarnos de las garras opresoras de los bancos, pero que ahora es más volátil que una dieta de moda. Los inversores se aferran a sus criptomonedas como si fueran boletos de lotería, apostando su futuro en un mercado que se tambalea al ritmo de un tuit de Elon Musk.

Y no nos olvidemos de la infraestructura. Porque, ¿quién no ama una tecnología que requiere más energía que un país pequeño? Todo en nombre de una seguridad que no es tan segura, pero que suena bien en las reuniones de inversores.

Hablemos de las buenas prácticas. ¿Quién necesita regulaciones cuando puedes tener un mercado salvaje donde lo mismo puedes hacerte rico que perder todo en un parpadeo? Porque, claro, la administración es para los débiles.

En el mundo de la inteligencia artificial, el blockchain es el primo molesto que nadie quiere, pero con el que todos tienen que lidiar. Promete mucho, cumple poco y siempre está a la búsqueda de la próxima gran cosa que pueda explotar.

Mientras tanto, compañías como Blockchain.com se pasean como si fueran los salvadores del universo financiero, vendiéndonos la idea de que en el futuro todos tendremos un billetero digital, cuando lo que realmente necesitamos es un refugio para cuando la burbuja estalle.

Así que, estimado lector, la próxima vez que alguien te hable de Ethereum, Solana o cualquier otra criptomoneda, recuerda: el humo tecnológico es denso y el brillo digital es a menudo solo un espejismo.